Esta hermosa casa de madera amueblada con mucha luz le invita a unas vacaciones relajantes y tranquilas. Desde la casa podrá llegar en pocos minutos al mar y a la playa, donde podrá dar hermosos paseos con toda la familia. Después de un día al aire libre, podrá poner los pies en alto en el acogedor salón o disfrutar sin estrés de delicias culinarias en la cocina bien equipada.
Cuando haga sol, podrá retirarse a la terraza y relajarse en los muebles de jardín o disfrutar de una cena en la mesa de comedor mientras escucha el canto de los pájaros. La playa de arena, a sólo 300 m, le invita a nadar, jugar y disfrutar de hermosas excursiones por la playa.
La casa, a prueba de inviernos, es también un agradable lugar de vacaciones en otoño e invierno. En la estufa encontrará el lugar más agradable para calentarse con una taza de chocolate caliente después de un día en la carretera.