Acogedora y encantadora casa de vacaciones, situada a sólo 150 m de la costa. Desde el salón se accede a una bonita terraza cubierta con chimenea, desde la cocina se accede a la gran terraza abierta donde se puede disfrutar plenamente del sol. Los niños también están atendidos con un columpio, tobogán y arenero - el jardín está vallado, por lo que puede dejar que los niños jueguen aquí sin preocupaciones. Atención: la estufa de leña del salón no se puede utilizar.
Stillinge Strand es un lugar muy animado en verano y los alrededores ofrecen muchas posibilidades para hacer excursiones, como la antigua ciudad vikinga de Trelleborg, Slagelse con zonas peatonales, cafés y tiendas. Cruce el puente sobre el Gran Belt y visite algunos de los muchos y hermosos castillos de Funen, como el de Egeskov, o haga una excursión a Legoland, en Billund. Para los pescadores, hay buena pesca a lo largo de la costa. Si juega al golf, hay un campo a unos 12 km. También merece la pena visitar la pequeña península de Reersø. Toda la naturaleza de la isla está protegida debido a la rara flora y fauna, y es una experiencia maravillosa recorrer a pie o en bicicleta los 9 km que la rodean. La isla también es especialmente conocida por su población de gatos sin cola. También merece la pena visitar Birkegårdens Haver, un jardín de aventuras de 10.000 m² con parque de animales y juegos, y Kragerup Gods, donde se realizan numerosas actividades. Podrá sentir el viento en las copas de los árboles, jugar al fútbol o navegar en canoa por el foso.
Stillinge Strand es un lugar muy animado en verano y los alrededores ofrecen muchas posibilidades para hacer excursiones, como la antigua ciudad vikinga de Trelleborg, Slagelse con zonas peatonales, cafés y tiendas. Cruce el puente sobre el Gran Belt y visite algunos de los muchos y hermosos castillos de Funen, como el de Egeskov, o haga una excursión a Legoland, en Billund. Para los pescadores, hay buena pesca a lo largo de la costa. Si juega al golf, hay un campo a unos 12 km. También merece la pena visitar la pequeña península de Reersø. Toda la naturaleza de la isla está protegida debido a la rara flora y fauna, y es una experiencia maravillosa recorrer a pie o en bicicleta los 9 km que la rodean. La isla también es especialmente conocida por su población de gatos sin cola. También merece la pena visitar Birkegårdens Haver, un jardín de aventuras de 10.000 m² con parque de animales y juegos, y Kragerup Gods, donde se realizan numerosas actividades. Podrá sentir el viento en las copas de los árboles, jugar al fútbol o navegar en canoa por el foso.