La casa dispone de un gran terreno, para jugar o relajarse junto a la piscina, que le refrescará en los calurosos días de verano. También hay una barbacoa cubierta en la que podrá preparar deliciosos platos a la parrilla.
Hasta el mar con playa de guijarros se conduce unos 9 km. La histórica ciudad de Split, con muchos lugares de interés y entretenimiento para todas las generaciones, está a 25 km.
El anfitrión ofrece la posibilidad de servir un rico desayuno por un suplemento.