Con la bonita Finca Sa Font Calenta, le esperan unas vacaciones en una típica propiedad mallorquina. La encantadora casa de piedra de cantera es una reminiscencia de la historia mallorquina y está idílicamente situada en el campo, lejos del turismo de masas. Hasta donde alcanza la vista, paisaje verde, diversidad mediterránea con cítricos y olivos, adelfas y mucho más. El hermoso jardín se integra casi a la perfección en el vasto paisaje. Las terrazas de piedra natural bordeadas de altas palmeras invitan a la relajación y también son ideales para tomar el sol en las tumbonas o a la sombra en la terraza parcialmente cubierta junto a la casa. En la zona de comedor al aire libre podrá disfrutar de su café matutino con total intimidad. En la barbacoa, por otro lado, podrá saborear los productos frescos que se ofrecen en el mercado semanal de Artà, alrededor de la Plaça Conqueridor, según recetas mallorquinas. Las familias amantes de la naturaleza pueden divertirse no sólo en el jardín, sino también en la mesa de ping-pong, situada un poco alejada de la casa.
En el interior de la acogedora casa de vacaciones también se puede disfrutar de un ambiente familiar. Aquí le espera la hospitalidad mallorquina y un ambiente acogedor. El sol brilla a través de las ventanas de celosía de madera en la auténtica casa de huéspedes, donde reinan los materiales naturales como la madera y las baldosas de terracota. Objetos decorativos antiguos completan el ambiente rústico. Un acogedor salón con chimenea y comedor contiguo ofrece una agradable sensación de bienestar para toda la familia en cualquier época del año. Detrás del comedor se encuentra la acogedora cocina-comedor con armarios de obra y todas las comodidades técnicas necesarias para cocinar. Naturalmente, la cocina tiene acceso directo a la terraza exterior. En la otra parte de la encantadora casa de campo hay dos dormitorios (con dos camas individuales o una cama doble francesa) y el cuarto de ducha. En resumen, la finca rústica Sa Font Calenta es un destino vacacional ideal para familias amantes de la naturaleza. ¡Esperamos su visita! La finca rústica de piedra natural Sa Font Calenta está enclavada en la exuberancia mediterránea de Mallorca y en un jardín paradisíaco. El alojamiento familiar se encuentra a unos 7 minutos en coche de Artà. Se puede llegar rápidamente al pueblo gracias a su proximidad a la carretera nacional, que sólo se oye ocasionalmente. El bonito pueblo medieval ofrece cultura, un animado mercado semanal los martes, así como otras oportunidades de compras y excelentes restaurantes. Hermosas playas de arena como Cala Mesquida, Canyamel o Cala Ratjada están a sólo 16 minutos en coche.
Esta es una casa de vacaciones en Fincallorca.
En el interior de la acogedora casa de vacaciones también se puede disfrutar de un ambiente familiar. Aquí le espera la hospitalidad mallorquina y un ambiente acogedor. El sol brilla a través de las ventanas de celosía de madera en la auténtica casa de huéspedes, donde reinan los materiales naturales como la madera y las baldosas de terracota. Objetos decorativos antiguos completan el ambiente rústico. Un acogedor salón con chimenea y comedor contiguo ofrece una agradable sensación de bienestar para toda la familia en cualquier época del año. Detrás del comedor se encuentra la acogedora cocina-comedor con armarios de obra y todas las comodidades técnicas necesarias para cocinar. Naturalmente, la cocina tiene acceso directo a la terraza exterior. En la otra parte de la encantadora casa de campo hay dos dormitorios (con dos camas individuales o una cama doble francesa) y el cuarto de ducha. En resumen, la finca rústica Sa Font Calenta es un destino vacacional ideal para familias amantes de la naturaleza. ¡Esperamos su visita! La finca rústica de piedra natural Sa Font Calenta está enclavada en la exuberancia mediterránea de Mallorca y en un jardín paradisíaco. El alojamiento familiar se encuentra a unos 7 minutos en coche de Artà. Se puede llegar rápidamente al pueblo gracias a su proximidad a la carretera nacional, que sólo se oye ocasionalmente. El bonito pueblo medieval ofrece cultura, un animado mercado semanal los martes, así como otras oportunidades de compras y excelentes restaurantes. Hermosas playas de arena como Cala Mesquida, Canyamel o Cala Ratjada están a sólo 16 minutos en coche.
Esta es una casa de vacaciones en Fincallorca.