Pase unos días maravillosos en familia o con amigos en la isla de Langeland, entre Funen y Zelanda. La casa está amueblada de forma práctica y confortable, por lo que no le faltará de nada. En la terraza protegida podrá comer al aire libre o simplemente disfrutar del sol.
Explore la hermosa ciudad con sus antiguas y cuidadas casas de comerciantes y sus sinuosas calles empedradas. Aquí podrá hacer maravillosas compras y maravillarse con las pequeñas tiendas de la ciudad. El puerto también es un lugar digno de ver, donde encontrará diversas actividades de ocio. Deténgase en uno de los muchos y buenos restaurantes o cafés después de probar suerte en varios deportes acuáticos.
Un lugar maravilloso para unas vacaciones relajantes.