Casa de vacaciones bien amueblada y cuidada en Ostende, a sólo 100 m del mar. Hay que contar con actividad de construcción en el barrio. El salón está conectado con la cocina abierta. La cafetera es una Senseo. A través de las puertas correderas del salón se accede al balcón amueblado con vistas a la playa y al tranvía. El salón dispone de TV digital por cable y un sofá cama para dos personas. En el pasillo hay una cama plegable para dos personas. El piso está situado en la 4ª planta, hay ascensor. Disfrute de la piscina exterior compartida con familiares y amigos, abierta en julio y agosto. Aparcamiento en la calle de pago. Se pueden alquilar bicicletas en las inmediaciones. Restaurantes y tiendas cercanas a poca distancia a pie. Se alquilan cuna y trona.
A pesar de su escasa población, la ciudad portuaria de Ostende es muy animada y llena de entretenimiento, está a sólo 35 kilómetros de la frontera holandesa. Es una buena idea visitar el Kursaal después de un agradable día en la playa, donde encontrará entretenimiento, variedad y emoción en la sala de conciertos, el restaurante y el gran casino. En Ostende hay excelentes oportunidades para ir de compras, como en la famosa calle Chapel. Merece la pena visitar algunos tesoros culturales, como el museo al aire libre de la Muralla Atlántica, el barco museo Amandine, la iglesia de San Pedro y San Pablo, el Fuerte Napoleón y la antigua residencia real de verano. Con sus hijos, puede ir al cine o visitar un parque infantil cubierto.
Durante su estancia, también puede visitar las ciudades cercanas de Bredene, De Haan y De Panne. En Ostende disfrutará de unas vacaciones variadas y este piso le ofrece una base excelente para ello. Este piso también es ideal si busca alojamiento cerca del popular Festival Afrocaribeño, que se celebra anualmente en agosto en Bredene, no lejos de Ostende.
A pesar de su escasa población, la ciudad portuaria de Ostende es muy animada y llena de entretenimiento, está a sólo 35 kilómetros de la frontera holandesa. Es una buena idea visitar el Kursaal después de un agradable día en la playa, donde encontrará entretenimiento, variedad y emoción en la sala de conciertos, el restaurante y el gran casino. En Ostende hay excelentes oportunidades para ir de compras, como en la famosa calle Chapel. Merece la pena visitar algunos tesoros culturales, como el museo al aire libre de la Muralla Atlántica, el barco museo Amandine, la iglesia de San Pedro y San Pablo, el Fuerte Napoleón y la antigua residencia real de verano. Con sus hijos, puede ir al cine o visitar un parque infantil cubierto.
Durante su estancia, también puede visitar las ciudades cercanas de Bredene, De Haan y De Panne. En Ostende disfrutará de unas vacaciones variadas y este piso le ofrece una base excelente para ello. Este piso también es ideal si busca alojamiento cerca del popular Festival Afrocaribeño, que se celebra anualmente en agosto en Bredene, no lejos de Ostende.