Acogedora y encantadora casa de vacaciones en una ubicación tranquila en una parcela natural arbolada, a sólo 200 m de la playa de arena.
El corazón de la casa es la acogedora sala de estar, que está directamente conectada con la cocina para que cocinar sea siempre un asunto de convivencia. El salón cuenta con una cálida estufa de leña para las estaciones más frías, una zona de comedor y un televisor para disfrutar de acogedoras tardes de cine o series.
En la terraza parcialmente cubierta con muebles de jardín, podrá leer, disfrutar del sol y de sus platos favoritos, que también se pueden preparar al aire libre gracias a la barbacoa. En el jardín les esperan columpios y mucho espacio para que los niños correteen.
La casa de vacaciones está a sólo 250 metros del fantástico restaurante Kadeau. Un corto paseo le llevará a una estupenda playa de arena apta para niños. Pero aunque tenga todo lo que necesita en su bonito complejo de vacaciones, merece la pena explorar la isla en coche o en bicicleta. Merece la pena visitar lugares tan conocidos como las ruinas de Hammershus, Dueodde Strand, la iglesia redonda de Østerlars, el famoso Valle del Eco (Ekkodalen) o los acantilados de Helligdomsklipperne. También merece la pena visitar los encantadores pueblecitos de Aakirkeby, Snogebæk y Svaneke.
Esta maravillosa casa de vacaciones es un puerto base para sus vacaciones que recordará con cariño.
El corazón de la casa es la acogedora sala de estar, que está directamente conectada con la cocina para que cocinar sea siempre un asunto de convivencia. El salón cuenta con una cálida estufa de leña para las estaciones más frías, una zona de comedor y un televisor para disfrutar de acogedoras tardes de cine o series.
En la terraza parcialmente cubierta con muebles de jardín, podrá leer, disfrutar del sol y de sus platos favoritos, que también se pueden preparar al aire libre gracias a la barbacoa. En el jardín les esperan columpios y mucho espacio para que los niños correteen.
La casa de vacaciones está a sólo 250 metros del fantástico restaurante Kadeau. Un corto paseo le llevará a una estupenda playa de arena apta para niños. Pero aunque tenga todo lo que necesita en su bonito complejo de vacaciones, merece la pena explorar la isla en coche o en bicicleta. Merece la pena visitar lugares tan conocidos como las ruinas de Hammershus, Dueodde Strand, la iglesia redonda de Østerlars, el famoso Valle del Eco (Ekkodalen) o los acantilados de Helligdomsklipperne. También merece la pena visitar los encantadores pueblecitos de Aakirkeby, Snogebæk y Svaneke.
Esta maravillosa casa de vacaciones es un puerto base para sus vacaciones que recordará con cariño.